Imagen de Geralt
El cambio y cómo reinventarse fue el tema del que hablamos en Píldoras de inspiración dentro del programa enComunicación .
Hace unos meses recibí una felicitación de cumpleaños muy especial que no me esperaba y me causó mucha ilusión al verla.
Se trataba de un vídeo con un mensaje personalizado y narrado por un anciano de cien años.
Contaba cómo había sido su vida hasta ese momento y como, a sus 50 años, decidió crear una orquesta y viajar por el mundo, a pesar de que la gente le decía que ya era demasiado mayor para vivir esas aventuras.
El hombre recordaba los momentos más significativos de su vida y comentaba que había tenido que cambiar muchas veces. En aquellos momentos siempre había alguien que le decía que era demasiado mayor para cambiar, incluso a veces se lo decía él mismo!!
Pero llegó a la conclusión que daba igual, que nunca sería demasiado tarde para hacer cosas nuevas.
En esta línea destaco dos libros que reflejan el cambio y las diferentes opciones que tenemos para reinventarnos aprovechando las circunstancias para iniciar un nuevo ciclo.
Mario Alonso Puig, con su libro “Reinventarse” explica que cuando comprendemos por qué hacemos lo que hacemos, somos capaces de pensar nuevas estrategias para alcanzar lo que parecía imposible. En este nuevo escenario de posibilidades aparecen la creatividad, sabiduría y energía que tenemos dentro para vivir con mayor serenidad, ilusión y confianza.
Una persona que está bloqueada emocionalmente también está anulada intelectualmente. De ahí que, cuando el miedo o la desesperanza se apoderan de nosotros, nuestro cerebro y cómo pensamos también quedan “secuestrados”.
Según Alonso, si decidimos reinventarnos, conviene enfocarnos en lo que queremos y no en lo que tememos.
Por otro lado, Charles Handy con su libro “La segunda curva” propone que para progresar en muchas áreas de la vida, a veces es necesario cambiar radicalmente y empezar un nuevo rumbo distinto al mantenido hasta el momento. Handy sugiere que las personas deben saltar a la «segunda curva» de sus carreras, de sus vidas, sin tener miedo de la perspectiva, antes de que la primera curva decline hacia abajo. Para lograrlo conviene encontrar una forma completamente nueva de entender los problemas que afrontamos.
Resulta más fácil ver el cambio cuando la crisis está en el horizonte, pero entonces se hace muy difícil de aplicar porque se van agotando el tiempo, las posibilidades de reacción y los recursos.
El éxito del modelo de la segunda curva está en que la nueva curva comience antes o cuando la primera llega al momento cumbre. Sólo en esta fase tenemos recursos, tiempo, energía y finanzas, imprescindibles para soportar la caída inicial de la segunda curva.
Todas las circunstancias de nuestra vida, no sólo las difíciles, son oportunidades para reinventarnos, superar ciclos agotados y comenzar otros nuevos.
Siempre hay tiempo para disfrutar, para aprender, para hacer cosas nuevas…